jueves, 19 de agosto de 2010

Negociado Federal de Investigaciones



Luis cruzó el recibidor pasando sobre el emblema que leía Federal Bureau of Investigations. Mientras esperaba el elevador, siguió con la vista los números iluminados.

—Cuatro, tres…

El tercer piso donde había pasado seis años constaba solamente con dos oficinas.

Subió al ascensor, apretó el número cinco sobrecogido por la inseguridad.

— ¿Seré capaz de cumplir con estas nuevas responsabilidades? ¿Será posible regresar al piso tres? - se preguntaba.


El elevador se detuvo, Luis se dirigió hasta la secretaria, mientras que de reojo observó los pasillos que corrían en todas direcciones, pudo ver decenas de puertas por donde entraban y salían personas constantemente. En uno de los pasillos los candidatos a nuevos agentes esperaban a ser llamados.

Buenos días señorita. Mi nombre es Luis Espada. Bienvenido señor Espada – contestó esta, no dude en comunicarse conmigo si necesita cualquier cosa. Gracias- dijo Luis, en un tono de voz que recobraba seguridad a cada minuto.

Haciendo galas de un ímpetu renovado y sin pensarlo dos veces, Luis comenzó a organizar el equipo necesario, para sus tareas de conserje.

© Septiembre 18, 2007.  M.R. Salamán

Pollo asado en salsa de ciruela



Ingredientes:
Un pollo entero desde el pico hasta el culo
Una Boca malhablada
Todos los insultos a los dioses
2 galones de Caldo de silencio
Una ciruela grande y redonda
Perejil
Sal y pimienta a gusto
Dos cilindros de gas


Preparación:
Precalentar el horno a 500º F. Tomar la boca malhablada con culantro y cilantrillo para atosigarle el culo al pollo hasta que reviente el jugo verde. Recuerde insertarle luego los insultos a los dioses y la ciruela para que tome un exquisito gusto agridulce. Amarre el culo para que no proceda escatológicamente. Sazonar el pollo si es necesario, el caldo será el que le dé el verdadero sabor. Sostenga el ave por las patas y sumérjalo en el caldo hasta que se ahogue. Corte cebollas y ajo y póngalo dentro del caldo. Espere a que el pollo cante como cisne. Unos días más tarde ya estará bien horneado y sabroso. No olvide, si el pollo fue insolente le tomará unos días, si el pollo era un irreverente maldito podrá tomarse más tiempo en ablandar.


Réquiem del pollo al horno:
Soy poeta censurado
mis malditas dicciones las llevo
en las entrañas
cocidas en mis labios y cachetes
adheridos en los dientes con acero alemán.
Llevo las palabras altisonantes
que estrujé en la cara de otro
palabalas que transgredieron
como tiroteo de esperma los oídos.
Algunas de mis voces en su alumbramiento
se enredaron en cordones de discreción
ahora enseñan las espuelitas
prometen fugarse en cualquier huevo o pataleta.

Mis labios
dos patas de gallina
Mi boca
el culo sodomizado por una ciruela
y tres hojas de perejil.
La lengua
anquilosada
en-callada
en una absurda red de canon, diplomacia, sal y pimienta.
Pronto dejaré de cacarear
cuando me arrastren al horno y se cuezan conmigo
léxico y elocuencia
en la sabrosa salsa de la censura
caldo de ajo, cebolla y silencio.

Sólo espero que al comerme me cague en ellos y en su madre.


© Sonia E. Galindo
http://sgalindo.blogspot.com/2009/06/pollo-asado-en-salsa-de-ciruela.html

Campeones




Le dio con un gancho de derecha
y otro de izquierda
y lo remató con un imponente uppercut
que tiró a su contrincante a la lona,
de la que no se levantó más.

El segundo,
puso a la voluptuosa rubia a mamar
y luego le taladró el culo y la chocha
para luego
tirarle todo su orgasmo en la cara
mientras gritaba

“¡¡Dios, Dios…!!”

El tercero,
se sentía un dios
con los aplausos que recibía del público
luego de echarlas todas de tres
y darle la victoria a su equipo
cuando se la donqueó en la cara
al centro estrella que medía 7 pies.

Los tres,
luego de pasada la euforia,
volvieron a su habitual depresión
y apagaron el televisor.

N.O.N.S. 2007
http://nunez-santiago.blogspot.com/2010/06/campeones.html

A Julia, from Julie


Ya las vecinas murmuran
que tú eres mi enemiga,
porque dicen que en verso
das al mundo tu yo.

Mienten, Julita de Burgos. Mienten, Julia de Burgos.

La que se alza en estos versos
no es tu voz: es nuestra voz;
tú podrás ser el significado,
pero el significante soy yo;
y existe un devenir entre las dos.

Tú eres viril copia
de la machista sociedad,
mientras que yo controlo
a los G.I. Joe.

Tú, necesitas tus poemas
para desnudar el corazón;
yo en cualquier esquina
me develo con pasión.

Tú te lo juegas todo
por ser como eres
y por eso te tachan
de incoherente.

Tú eres sólo el deseo de una fotocopia masculina.
Yo no, yo soy la vida, la fuerza, la mujer.

Tú eres de los poetas,
minimizada por el canon, yo no;
yo de nadie o del que quiera,
porque a quien quiero
en mi limpio o perverso sentir me doy.

Tú andas despeinada e incolora
por el viento y el sol.

Yo voy al beauty parlor
y llamo la atención.

Tú andas como el rocín antes desbocado,
viviendo cada día sin sentido, sin meta.

Yo no, yo soy una mujer astuta,
exitosa y con agenda.

Tú piensas que tú mandas,
que en ti manda tu solo corazón.

Pero en tu historia inventada,
todos te mandaban;
en ti mandaban tus amantes, los poetas,
las ideologías rebeldes, el pueblo,
el cielo y el infierno,
y el machismo que querías imitar.

En mí no, que en mi manda mi razón,
mi solo pensamiento;
no hay duda de que mando yo.

Tú, flor del pueblo; y yo la flor del mall.

Tú, no tienes nada, y a nadie le debes.

Yo lo tengo todo, y todo lo debo.

(¡Que se preocupen ellos!)

Tú, un uno más del divisor social;
y yo, una supermujer virtual.

¿Para qué enfrentarnos a un duelo fatal?

Cuando los emails corrieron desbocados,
dejando atrás cenizas de memos quemados,
y cuando el conjunto de ovarios,
dejó catatónicos a mil machos,
no contra ti, sino contra todo el viejo canon,
yo fui en medio de ellas con la laptop en la mano.

© Susan Hernandez

HP Babilonia




Detrás de este escrito absurdo
existe una verdad absolutista.

Eso me dijo un espiritista
con cabeza de asno.

Dilema retardado,
como los niños que degollaron la niña,
con deseos canibalistas.

Imagen de letrina
de estigia
va más allá de la vida,
a la deriva.

Como un hombre con moral de tigre,
Hombre que vomita tigres.

Demacrando obras.

Afilando dientes.

Y mi mente
dentro de lo absurdo
no cree estar demente.

Es normal evacuar por la boca
todos los humanos lo hacen.

Tengo una Nordo-Mania
una Yanqui fobia científica,
lo tengo que tener todo,
que todo sea mío,
no todos los hombres son iguales,
algunos se arrastran
como yo.

© Héctor Pérez Babilonia

lunes, 5 de noviembre de 2007

Insomnio


Al despertar
ya no pude
volver a dormir.

El sonido de las estrellas ardientes;
la eclosión y crecimiento del espacio,
complementan la melodía
de la hierba que crece.

Mis ojos
se inundan de estímulos
que transformo
en imágenes propias.

Miré mi cuerpo
lo vi unirse
a la corteza de los árboles;
a la humedad de las nubes.

© octubre 2007. M.R. Salamán

Me sentí rodeado de mi mismo.

Mi alma tomó forma, satisfecha.

No necesité más de privilegios,
ni de amenazas terribles,
para amar la vida.

Comprendí
la similitud de las diferencias.
Separé lo esencial de lo superfluo
y lloré.

Mi llanto
se evaporó en el aire
y ni la muerte
pudo ya, hacerme dormir.


© 2007.  M.R. Salamán